El parapente es un deporte aéreo que permite experimentar la sensación única de volar sin el uso de motores. Este deporte consiste en un ala flexible y un arnés, lo que lo convierte en una actividad accesible tanto para aventureros experimentados como para principiantes. A diferencia de otros deportes aéreos, el parapente no requiere de grandes infraestructuras, solo una colina o montaña y las condiciones climáticas adecuadas para despegar y planear sobre impresionantes paisajes.

Para muchos, la idea de volar en parapente puede generar una mezcla de entusiasmo y nervios, especialmente si es la primera vez. Sin embargo, el parapente es un deporte seguro cuando se realiza con las precauciones adecuadas y el equipo apropiado, sacado de una tienda de material de parapente especializada como Hike and Fly. En los últimos años se ha convertido en una actividad que ha crecido en popularidad en todo el mundo, debido a la libertad que ofrece y la sensación de conexión con la naturaleza. En este artículo, exploraremos todo lo que se necesita saber antes de lanzarse al primer vuelo en parapente, hablando tanto de las medidas de seguridad como de los requisitos físicos y mentales para disfrutar al máximo esta aventura en los cielos.

Requisitos físicos y mentales

Aunque el parapente es un deporte accesible para muchas personas, es importante estar físicamente y mentalmente preparado para la experiencia. En términos físicos, no es necesario ser un atleta de alto rendimiento, pero se requiere un nivel básico de forma física. Para el despegue, se necesitará correr cuesta abajo con el parapente desplegado detrás hasta que el viento lo eleve, lo que demanda cierta coordinación y resistencia Por otro lado, el aterrizaje también puede implicar correr o caminar al tocar el suelo, por lo que es importante estar en buenas condiciones físicas.

En cuanto a los aspectos mentales, es fundamental no tener un miedo extremo a las alturas, ya que esto podría afectar la capacidad para disfrutar y controlar el vuelo. La confianza en el equipo y en el instructor también es fundamental para mantener la calma, ya que, si es la primera vez, se volará en parapente biplaza, lo que significa que se estará acompañado por un piloto experimentado que controlará todos los aspectos técnicos del vuelo. En general, tener una actitud positiva y estar dispuesto a seguir las indicaciones del instructor hará que la experiencia sea más segura y agradable. La mayoría de los principiantes se sorprenden de lo tranquilo que puede ser el vuelo una vez que están en el aire, disfrutando de las vistas y el silencio.

Equipamiento necesario para hacer parapente

El parapente requiere un equipo especializado diseñado para garantizar la seguridad del vuelo, existiendo tiendas especializadas online con los parapentes, arneses, paracaídas, cascos y demás accesorios para el vuelo. El ala del parapente, también conocida como vela, es el elemento más importante, y, está hecha de un tejido resistente y ligero que permite al piloto planear con el viento. El diseño del ala es aerodinámico, lo que facilita el control en el aire. El parapente está conectado al piloto mediante una serie de cuerdas y un arnés en el que el piloto se sienta cómodamente durante el vuelo.

Además, el equipo de seguridad incluye un paracaídas de emergencia en caso de que el vuelo no transcurra como se espera, aunque su uso es muy poco frecuente. Para la seguridad del piloto, es importante utilizar un casco protector y guantes, especialmente si se vuela en condiciones climáticas frías. En algunas ocasiones, se recomienda llevar gafas de sol para proteger los ojos del viento y del reflejo del sol en las alturas, logrando un mejor manejo del parapente. En cualquier caso, las escuelas de parapente proporcionan todo el equipo necesario para los principiantes, por lo que no es necesario comprarlo para el primer vuelo. Sin embargo, si se decide continuar practicando parapente de manera regular, es recomendable invertir en un equipo propio de calidad.

Medidas de seguridad y elección de la escuela de parapente

La seguridad es la prioridad número uno cuando se trata de volar en parapente, y, por ello, elegir una escuela certificada y con instructores experimentados es fundamental para asegurar que esta primera experiencia sea segura y disfrutable. Las escuelas de parapente deben seguir normativas de seguridad establecidas y realizar verificaciones constantes del equipo. Además, deben proporcionar una instrucción detallada sobre cómo comportarse en el aire, cómo realizar un despegue seguro y cómo aterrizar sin problemas.

En las primeras sesiones, es importante volar en condiciones climáticas adecuadas. El viento es un factor fundamental para el parapente, ya que permite mantener el vuelo estable, haciendo que, demasiado viento, o la falta de él, pueden suponer un riesgo. Por ello, los instructores deben saber cómo evaluar las condiciones del día para decidir si es seguro volar. En cualquier casos, tal y como hemos mencionado, para los principiantes es necesario iniciar con un vuelo en parapente biplaza. De esta manera, el piloto experimentado se encargará de todo el control, permitiendo disfrutar de la experiencia sin preocupaciones.