La llegada de un bebé es uno de los momentos más emocionantes en la vida de cualquier familia. No obstante, con esa emoción vienen muchas preguntas, especialmente cuando se trata de preparar todo lo necesario para su llegada. Una de las dudas más comunes que surgen entre padres primerizos es: “¿Qué ropa necesita realmente un recién nacido?” Con tantas opciones en el mercado, puede resultar fácil caer en la tentación de comprar de más o elegir prendas que no son del todo prácticas.

Lo cierto es que durante sus primeros meses de vida, un bebé necesita comodidad, suavidad y facilidad al vestir. Las prendas deben adaptarse a su piel delicada, permitir el cambio frecuente de pañal y facilitar que los padres puedan vestirlo sin esfuerzo. La estética, aunque importante, pasa a un segundo plano frente a la funcionalidad y seguridad de la ropa. En este sentido, la ropa de bebe unisex es una de las opciones óptimas, siendo piezas básicas que permitirán estar preparado en todo momento. A continuación, hablaremos de los esenciales para cualquier recién nacido, sin complicaciones, evitando compras innecesarias y asegurando que el bebé esté siempre cómodo y protegido.

Bodies

Los bodies son sin duda la prenda más práctica para cualquier recién nacido. Se ajustan perfectamente al cuerpo del bebé y, gracias a sus broches a presión, facilitan los cambios de pañal sin necesidad de quitar toda la ropa. Los bodies están diseñados para mantener la barriguita protegida y evitar que el pañal se desplace. Además, se pueden encontrar con manga corta, manga larga o incluso tirantes, lo que los hace adaptables a cualquier estación del año.

Uno de los mayores beneficios del body es que evita que el bebé se desarrope mientras duerme o se mueve, manteniéndolo siempre cómodo. Lo más adecuado es tener al menos 6 o 7 bodies de algodón suave, preferiblemente con abertura cruzada en el cuello, lo que facilita mucho colocarlo sin tener que pasarlo por la cabeza. A la hora de elegir bodies, es recomendable fijarse en que las costuras sean planas y los tejidos hipoalergénicos.

Pijamas enteros

Durante las primeras semanas, los recién nacidos pasan la mayor parte del día durmiendo. Por eso, contar con pijamas cómodos, suaves y seguros es básico. Los pijamas enteros, también llamados peleles o monos, cubren el cuerpo por completo, incluyendo los pies. Esto evita que el bebé se enfríe por la noche y proporciona una sensación envolvente que les resulta reconfortante.

La mayoría de estos pijamas vienen con cierres de botones o cremallera que facilitan el cambio de pañal sin tener que desnudar completamente al bebé. En este sentido, es recomendable tener al menos 4 o 5 pijamas en rotación, ya que es frecuente que se ensucien con babitas, regurgitaciones o escapes del pañal. Además, hay que elegir siempre tejidos como el algodón, que permiten la transpiración y cuidan la piel del recién nacido.

Gorros de algodón

Aunque pueda parecer un detalle menor, los gorros de algodón son una prenda importante en los primeros días del recién nacido, especialmente si nace en meses fríos o en climas templados. Los bebés pierden una gran cantidad de calor corporal por la cabeza, y al no tener aún un sistema de autorregulación térmica eficaz, un gorrito les ayuda a mantenerse a una temperatura adecuada.

Durante los primeros días tras el nacimiento, incluso en hospitales, se acostumbra a colocarles un gorro suave para protegerlos del cambio brusco de temperatura. Por tanto, es importante que este sea de algodón fino, sin costuras internas gruesas ni elásticos apretados que puedan dejar marcas. Debe ajustarse bien, sin apretar, y permitir que el bebé se sienta cómodo en todo momento.

Polainas y pantalones con pie

Otra prenda muy práctica para completar el conjunto diario del recién nacido son las polainas o pantalones con pie. Estas prendas cubren completamente las piernas y los pies, lo cual es perfecto para mantener al bebé abrigado sin necesidad de ponerle calcetines, que muchas veces se caen o le quedan apretados. Además, al no tener cintura rígida ni botones, son muy cómodas para el bebé, especialmente cuando está acostado.

Las polainas suelen combinarse con bodies o camisetas de algodón. Además, al ser fáciles de poner y quitar, permiten cambiar el pañal rápidamente sin dificultad. Estos modelos están disponibles en tejidos suaves y elásticos, lo cual es importante para no restringir el movimiento del bebé. Como pasan muchas horas en posición horizontal o en brazos, lo importante es que la ropa no tenga costuras que les molesten ni elásticos muy fuertes.

Camisetas cruzadas o tipo kimono

Durante los primeros días, cuando el ombligo aún está cicatrizando y el bebé es muy pequeño y delicado, las camisetas tipo kimono se vuelven una excelente opción. Se trata de camisetas que se abren completamente y se abrochan lateralmente con broches o lazos, lo que evita tener que pasar la prenda por la cabeza del bebé. Esto facilita mucho el momento del cambio, especialmente para padres primerizos que aún no dominan la técnica de vestir al recién nacido.

Estas camisetas son muy cómodas y suelen usarse junto a polainas o como complemento bajo mantas y arrullos. Algunas vienen con manoplas incorporadas para evitar que el bebé se rasque con sus propias uñas. Además, al no tener costuras interiores pronunciadas ni etiquetas, cuidan mejor la piel sensible del bebé durante sus primeros días de vida.