La legendaria banda canadiense Rush, fue formada en 1968 y desde entonces ha dejado una huella profunda en el mundo del rock progresivo, influyendo en generaciones tanto de músicos como de fanáticos. El grupo, compuesto principalmente por Geddy Lee (bajo y voz), Alex Lifeson (guitarra) y Neil Peart (batería), logró una combinación única de virtuosismo instrumental, complejas estructuras musicales y letras profundamente filosóficas, que les permitió destacarse en un panorama musical que, en ese momento, era dominado por géneros más comerciales. Aunque en sus primeros años la banda buscaba su identidad sonora, fue con la llegada de Peart en 1974 cuando encontraron su estilo distintivo, fusionando influencias del hard rock, el jazz y la ciencia ficción para crear obras maestras como “2112”, “Moving Pictures” y “Hemispheres”. Su música trascendió fronteras, no solo por la innovación sonora, sino también por la complejidad y profundidad de sus temas, que abarcaban desde la ciencia ficción hasta el existencialismo.

La complejidad de sus composiciones les otorgó un estatus casi mítico entre los seguidores del rock progresivo, pero también los situó en el centro de debates sobre la accesibilidad de su música y como su grupo de fans eran “elitistas”. Sin embargo, sus conciertos son reconocidos por la precisión y energía que no se comparaban con otros grupos, ofreciendo experiencias memorables donde no solo brillaba su música, sino también su peculiar sentido del humor. Los canadienses no estuvieron exentos de controversias, con Peart siendo un blanco recurrente de debates debido a sus posturas filosóficas y políticas plasmadas en sus letras, pero aún así, Rush es considerado uno de los pilares del rock, con un legado que sigue resonando en aquellos que buscan innovación musical y lírica.
Contratados con prisa por US$25
En agosto de 1968, un trío de jóvenes músicos fueron contratados para tocar por $25, por lo que se encontraban a punto de subir al escenario de un café ubicado en una iglesia de un suburbio de Toronto, Canadá. El grupo no contaba con un nombre oficial, así que Bill Rutsey (el entonces baterista) pidió ideas a los que estaban acompañándolos durante la espera. Entre esos acompañantes se encontraba su hermano, que sugirió “Rush” para nombrar al grupo, debido a la prisa que demandaba la situación particular. Esto resonó en el resto de integrantes, quienes subieron al escenario a tocar y mantuvieron el nombre desde entonces. De esta manera fue que la banda adoptó un nombre que, sin saberlo en ese momento, marcaría el inicio de una de las trayectorias más icónicas en el mundo del rock progresivo.
Una banda de nerds para nerds
Rush ha sido catalogada por muchos como una banda para nerds, dado que sus composiciones están impregnadas de conceptos excéntricos y referencias que pueden resultar incomprensibles para el público general. La complejidad de su música se manifiesta en la utilización de elementos poco convencionales, como la inclusión de la clave Morse en las introducciones de sus temas, o el hecho de que el título de una de sus piezas instrumentales, “YYZ”, hace alusión al código internacional del aeropuerto de su ciudad natal, Toronto. Estos detalles excéntricos, lejos de alejar a sus seguidores, han forjado una conexión profunda con aquellos que aprecian la creatividad en su forma más pura.
Gran sentido del humor

A pesar de su reputación como serios exponentes del rock progresivo y de la complejidad musical, los miembros de Rush siempre mostraron un gran sentido del humor, así como un ambiente ameno entre ellos. Esta faceta juguetona se evidencia en su canción “La Villa Strangiato”, que no solo destaca por su virtuosismo instrumental, sino que también incluye referencias a dibujos animados, demostrando que, detrás de la sofisticación y la profundidad de sus composiciones, había espacio para la diversión.
La gira con Kiss
En 1975, Rush tuvo la oportunidad de abrir para Kiss durante la gira de su álbum “Fly by Night”, un momento que marcó profundamente la trayectoria de la banda. Mientras que Kiss era conocido por sus impresionantes espectáculos llenos de energía y su estilo de vida exuberante, los jóvenes músicos de Rush sorprendieron a muchos estadounidenses al optar por un enfoque radicalmente diferente tras cada actuación. En lugar de unirse a las fiestas o socializar con las groupies, los integrantes de Rush preferían retirarse a sus habitaciones de hotel para “descansar y recuperarse”, dejando atónitos especialmente a los integrantes de Kiss, quienes no entendían cómo podían comportarse de esa manera, teniendo la oportunidad del exceso que ofrece el rock n’ roll.
La verdadera razón de su encierro en habitaciones de hotel
La decisión de los miembros de Rush de retirarse a sus habitaciones de hotel tras los shows con Kiss en 1975 tenía una razón particular que Geddy Lee confesó hasta muchos años después. Lejos de la vida de fiesta que muchos esperaban, la banda se sumergía en una noche de relajación que incluía fumar una cantidad increíble de porros mientras veían episodios de la clásica serie “The Twilight Zone”. Esta situación particular explicaría el por qué decidían alejarse del glamuroso mundo de fiesta que podían propiciar los miembros de Kiss después de su gran espectáculo.
Demasiado drogados para componer un disco

Durante las sesiones de composición para su álbum “Caress of Steel”, Geddy Lee confesó que los miembros de Rush estaban demasiado drogados para concentrarse adecuadamente en su trabajo, lo que comprometió la calidad del proceso creativo. Sin embargo, la prolongación del tiempo de producción resultó ser una bendición disfrazada, ya que permitió a la banda escuchar sus ideas después de seis meses y reflexionar sobre el material creado. Al revisitar su trabajo, se dieron cuenta de que había múltiples aspectos que necesitaban ser mejorados, lo que los impulsó a volver al estudio para trabajar en la versión final del álbum que conocemos hoy en día.
Fanáticos de Radiohead
Un par de miembros de Rush han expresado abiertamente su admiración por bandas como Radiohead, reconociéndolas como agrupaciones aventureras y desafiantes que logran una fusión refrescante de lo antiguo y lo nuevo. Geddy Lee, en particular, ha manifestado que la música de Radiohead le devolvió la fe en el género, pues le recordaba que siempre hay espacio para la innovación y la exploración en el rock.
Una pequeña recompensa blanca
El excéntrico vocalista y bajista de Rush, Geddy Lee, confesó haber lidiado con problemas significativos relacionados con la cocaína, a la que describía como “una pequeña recompensa” que consumía al final de cada día para aliviar la presión de la vida en la carretera. Esta adicción no solo afectó su bienestar personal, sino que también tuvo un impacto notable en el entorno de la banda, creando tensiones que amenazaban con interrumpir su carrera. Afortunadamente, Lee pudo encontrar el camino hacia la recuperación, en gran parte gracias al apoyo incondicional de su madre, quien lo alentó a enfrentar sus demonios y buscar ayuda.
Grandes reconocidos en la historia de la música

A lo largo de su destacada trayectoria, Rush ha sido galardonada con numerosos premios y honores que reflejan su impacto en la historia de la música. En 1994, la banda fue incluida en el Salón de la Fama del Rock and Roll, un reconocimiento que celebra su influencia y contribuciones al género del rock progresivo. Además, en 2010, Rush fue homenajeada con una estrella en el Paseo de la Fama de Canadá, solidificando su estatus como íconos culturales en su país natal. A lo largo de los años, también han recibido múltiples premios Juno, que celebran la excelencia en la música canadiense.
Exceso de sintetizadores
Durante la producción de su álbum “Hold Your Fire”, la banda Rush enfrentó intensas tensiones relacionadas con el uso de sintetizadores, un elemento que se volvió tan conflictivo que comenzaron a discutir de manera agresiva sobre su inclusión en la música. Las diferencias creativas llegaron a un punto crítico, donde incluso se planteó la posibilidad de disolverse, una situación que habría marcado el final de su legado musical. Sin embargo, los integrantes de Rush encontraron un camino hacia la reconciliación y lograron ponerse de acuerdo en la dirección sónica que querían para el álbum que seguiría haciendo historia en la música.